Aika y Shinichi empiezan a vivir juntos y se preparan para casarse. El administrador del edificio de apartamentos vino de visita y parecía una buena persona, por lo que ambos nos sentimos seguros. Un día, Aika estaba jugueteando con las tuberías de agua de la lavadora cuando fue visitada por el gerente. Él la ayudó a arreglar la tubería y le regaló un pastel para celebrar su mudanza. Sin sospechar nada, Aika comió un poco. Tan pronto como comió, inmediatamente se sintió mareada y no supo nada más. Cuando despertó, descubrió que el gerente estaba aferrado a ella y su sudor empapaba todo su cuerpo. Su cuerpo parecía no tener fuerzas, estaba impotente para dejar que él invadiera su cuerpo y liberara todo su semen sucio dentro de ella. Él tomó una foto de esta escena y la usó para amenazarla, obligándola a servirle muchas veces más. Pero gradualmente, el placer sexual que le produjo superó su disgusto. Poco a poco fue conquistada por él y ella misma quería aún más ser satisfecha sexualmente por él...